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Durante años el hoy Presidente Andrés Manuel López Obrador ha acusado a medios de comunicación, empresarios y políticos de un complot en su contra y estos mismo medios se han encargado de desprestigiar los hechos pese a que son comprobables y concretos.
Aquí los más célebres.
Vicente Fox
En 2006 AMLO compitió por primera vez por la Presidencia de la República y el Presidente en turno, Vicente Fox, se encargó de tratar de descarrilar la campaña del tabasqueño.
Primero con el juicio de desafuero por haber desobedecido una orden judicial para detener la apertura de una calle a través de un terreno para comunicar a un hospital.
Al final fue llamarada de petate porque, pese a resolverse el desafuero, no tuvieron los "pantalones" para proceder contra AMLO, tanto, que fueron los propios panistas quienes pagaron la fianza que ya se había fijado para que, de darse la oportunidad, López Obrador siguiera su proceso en libertad.
Felipe Calderón
Al segundo Presidente panista de la Historia le importa llegar a los fines sin importar los medios, lo que dejó claro con su famosa frase "haga sido como haga sido" al referirse así a su "victoria" electoral que lo llevó a Los Pinos.
Hoy sabemos que hubieron recursos cuestionables que pasaron por su campaña, desde vínculos con la ex-lideresa magisterial Elba Esther Gordillo hasta el presunto financiamiento del Cartel de Sinaloa (no en balde está ahí el caso de Genaro García Luna).
Así mismo, el estratega publicitario Antonio Solá fue quien construyó la campaña sucia "López Obrador, un peligro para México" y en 2018, poco antes de los comicios electorales, confesó en una entrevista que todo fue una farsa y que el único peligro que se le puede achacar al hoy Presidente de la República es el que se construyó el el "cuarto de guerra" de PAN en la campaña presidencial de 2006.
AMLO vive del presupuesto
Nada más falso.
Los detractores de Andrés Manuel repitieron hasta el hartazgo que el susodicho llevaba sin trabajar más de una década y, aún así recorrió el país como nadie: "¿Con qué dinero, decían sus detractores?".
Al declarar su 3 de 3 informó no tener tarjetas de crédito, propiedades, acciones en empresas o bienes, aunque sí asentó haber percibido ingresos de los Partidos de los que fue Presidente Nacional y de cuando fue Jefe de Gobierno del D.F.
Ahora, de todos es sabido que su esposa, la Dra. Beatriz Gutiérrez Müller, tiene un trabajo estable, sigue recibiendo regalías de las ventas de sus libros, por muchos años dio conferencias en diferentes lugares y actualmente cuenta con una plaza de docente investigadora de tiempo completo en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Así que esto tampoco si querían saber ¿De dónde para los viajes? Solo tenían que seguir el dinero, después de todo ellos fueron gobierno antes de AMLO.
Los medios
Ante la falta de efectividad de los políticos, los medios de comunicación entraron al quite.
Periódicos, noticieros y hasta programas de chismes le han entrado al juego de las Fake News, sobre todo desde que AMLO comenzó a perfilarse como el favorito para ganar la elección presidencial de 2018.
Se dijo que...
* Quería devolver la rectoría de la educación a los sindicatos (falso).
* Que estaba aliado con los rusos (falso).
* Que pretendía armar un ejército de ninis para coaccionar a los otros Poderes de la Unión (Ruiz Healy, no se nos ha olvidado).
* Que regalaría dinero a la gente sin trabajar (falso).
* Que estaba en contra de la inversión privada y extranjera (súper falso).
* Que comenzaría un sinfín de expropiaciones (falso).
Nada de lo anterior funcionó, todas quedaron como calumnias con argumentos infundados.
Hoy, a pesar de que López Obrador es el Presidente de México desde el 1 de diciembre, periódicos como Reforma o El Universal y comunicadores como Ricardo Alemán, Joaquín López Dóriga, Carlos Loret y Ciro Gómez Leyva, entre otros, le siguen tirando durísimo, pareciendo más unos damnificados del chayote que ya no reciben del gobierno federal, que críticos del sistema político actual.
Los efectos de los chismes
Esto provocó en su momento que la transición no fuera tan tersa como se decía y ciertos personajes parecía que seguirían siendo los portavoces de un sistema que ya se fue y muy, pero muy probablemente no regrese, por lo que esto deja constancia de que el complot es real, sí existe y no importa que se diga lo contrario o se traten de tergiversar las cosas, es algo que se ha convertido en una tradición contra los personajes "incómodos" y se nota a plena luz del día.
El papel de la oposición, según sus integrantes, es estar contra el Gobierno, atacarlo y no aplaudirle...
¿Entenderán lo que realmente significa ser oposición o será que como es su primera vez no tienen ni idea de cómo actuar? Porque pareciera que lo importante es atacar y quejarse y no proponer nada.
A pesar de esto, AMLO ve el lado positivo de las cosas, no se engancha y, como lo prometió, ha trabajado ininterrumpidamente desde el 3 de julio de 2018 y está por cerrar el año como no se veía hace décadas.
Usted que opina, estimado lector...
¿Piensa que AMLO será desgastado por la guerra sucia en su contra o saldrá avante y casi sin rasguños?
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