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Como todos sabemos en Puebla se realizó un gigantesto, butrdo y grotesco fraude electoral, todos fuimos testigos de eso, desde la campaña con la compra del voto y luego el día de la elección con el robo de urnas y asaltos a las casillas de votación.
Pese a las sospechas de fraude y al hallazgo que hicieron legisladores electos de MORENA en julio pasado (lo que consta en video), cuando descubrieron un laboratorio electoral clandestino instalado en un hotel donde fabricaban actas de escrutinio y cómputo y manipulaban las urnas, el tribunal electoral de Puebla resolvió dar constancia de mayoría a Marta Erika Alonso, esposa del ex-gobernador y actual Senador Rafael Moreno Valle y declararla Gobernadora Electa del Estado.
Obviamente las críticas no se hicieron esperar y MORENA impugnó la elección, pues tenía evidencias de que le hicieron fraude a su candidato a la gubernatura del Estado, Luis Miguel Barbosa.
Llama muchísimo la atención y es imposible pasar por alto el hecho de que MORENA ganó en casi todos los cargos: legislaturas federales (Diputados y Senadores), el Congreso Estatal (Diputados Locales), Ayuntamientos (Presidentes Municipales y Regidores), Presidencia de la República, pero perdió la elección al cargo de Gobernador del Estado. Algo completamente absurdo.
Ahora... ¿qué pasó?
Por primera vez en la historia el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, ante las dudas de diferentes calibres que generó la elección, decidió conceder el Voto por Voto, Casilla por Casilla, es decir, el recuento del total de las casillas para el cargo de Gobernador del Estado, para lo que los paquetes electorales fueron trasladados a la sede del TRIFE en la CDMX.
Días atrás cuando se vigilaban las bodegas donde se encontraban resguardados los paquetes electorales, comenzaron las manifestaciones de inconformidad, ya que se veía gente entrar y salir de la mencionada bodega y, cuando por fin permitieron la entrada a representantes de Partidos y medios de comunicación, resultó que muchos paquetes estaban abiertos, presentaban alteraciones o estaban sellados con cinta canela y no con la cinta de seguridad que entregó el INE el día de la elección a los Presidentes de Casilla, además de que los "sellos" de las puertas tenían solo una hoja blanca pegada con cinta canela y firmada por algunas personas e incluso se encontró que una puerta ni "sellos" tenía.
Lo siniestro del asunto
Lo macabro es que, después de que la Sra. Alonso pedía una y otra vez a Barbosa y a MORENA en medios de comunicación y redes sociales que aceptaran el resultado, cuando se supo la medida del TRIFE, así, mágicamente, la susodicha celebró dicha acción en su cuenta de twitter y aseguró que saldría triunfadora. El PAN dio su declaración por este mismo medio unos días después.
Celebro la decisión del @TEPJF_informa de abrir los paquetes electorales, se contará voto por voto. Estoy convencida que con esta resolución, se tendrá la plena y absoluta certeza del triunfo que obtuvimos para la gubernatura de Puebla.— Martha Erika Alonso (@MarthaErikaA) 20 de septiembre de 2018
Acción Nacional no tiene duda de que tras el recuento de votos, vamos a superar el 4% de diferencia que tenemos respecto al competidor más cercano. La coalición Por Puebla al Frente ganó la elección a gobernador y haremos un gran gobierno para la gente: @marcelotorresc.— Acción Nacional (@AccionNacional) 24 de septiembre de 2018
Cuando uno está tan seguro de su victoria, "haiga sido como haiga sido", pasan los extremos, una de dos cosas, o te manifiestas en contra de la medida, pues no quieres que te caiga el "chahuiztle" o lo celebras porque sabes que el conteo de los votos saldrá a tu favor. De cualquier forma puedes quedarte con el tesoro.
Y esto es precisamente lo raro, porque después de meses de que se le pidiera a Barbosa y a MORENA que ya no insistieran, de pronto un buen día, los acusados de fraude dice "sí, que se cuente voto por voto".
Lo procedente si "gana" Martha Erika Alonso
Ante la posibilidad de que la esposa de Moreno Valle "gane" los comicios en el "Voto por Voto", MORENA prepara el último recurso, la anulación de la elección, bajo el argumento de que los paquetes electorales fueron claramente manipulados y que, por consecuencia, no se puede garantizar la certidumbre de lo que estas contienen.
A lo anterior se agrega que testigos e incluso los mismos funcionarios del instituto electoral poblano, afirmaron que la bodega donde se resguardaban los paquetes electorales nunca estuvo totalmente cerrada, que gente entraba y salía constantemente e incluso guardaban vehículos al interior, lo que hace todavía más sospechoso el resultado que se pudiera obtener.
Cabe mencionar que para el recuento de los votos se pidió apoyo a los tribunales electorales de la CDMX y del Estado de México (sí, estimado lector, los que avalaron el burdo triunfo de Alfredo del Mazo en 2017 y que intentaron robarle 10 diputados locales a MORENA en la pasada elección de 2018), por lo que los focos rojos aún no deben apagarse, pues nadie garantiza que el personal del electoral mexiquense no le vaya a dar una "ayudadita" a Martha Erika para terminar de robar la elección.
Lo procedente si Martha Erika Alonso pierde
Lo primero que sucedería es que la constancia de mayoría de la Sra. de Moreno Valle quedaría sin efecto; posteriormente, podrían dar el triunfo a Barbosa o bien, anular la elección (lo que ya sucedió en la alcaldía de Coyoacán en la CDMX, donde se nombrará un alcalde provisional que convocará a elecciones extraordinarias en un lapso no mayor a un año).
De anularse la elección, ni Martha Erika Alonso ni Luis Miguel Barbosa podrían participar nuevamente en los comicios y los correspondientes institutos políticos tendrían que buscar nuevos candidatos para la nueva votación, mientras que el Congreso poblano deberá nombrar a un Gobernador Interino que convoque a elecciones extraordinarias en un plazo no mayor a un año.
Por lo tanto, esto aún no termina y recordemos, Puebla no es el final, sino un eslabón de una cadena enorme que trata de minimizar el triunfo de la izquierda apoyada de una abrumadora mayoría ciudadana, pues según encuestas como la de Reforma, ADN Político o Radio Fórmula, a la opción de los más de 30 millones de votos y sus respectivas mayorías en los Estados se le suman los opositores que darán el beneficio de la duda, es decir, que un gobierno de izquierda llegará en diciembre (aunque en algunos cargos ya llegó) con una aprobación superior al 50% o 60%.
Las segundas oportunidades se dan muy pocas veces y México tiene en este momento la suya, por lo que no la puede dejar pasar y Martha Erika Alonso no debe llegar a Gobernadora y si lo hace, que no se diga que MORENA no luchó hasta el final.
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